La figura elegida fue Charles Chaplin en su película "Sholuder Arms" (Armas al Hombro). La idea de realizar algo sobre la Primera Guerra Mundial en el centenario de dicha confrontación, con sus trincheras llenas de barro y la gran obra del maestro mudo nos sedujo lo suficiente como para ponernos a final del 2014 manos a la obra. Con la ayuda nuestra pequeña colaboradora (Luz Labory) aprovechando las vacaciones de Navidad acabamos la trinchera, pero la figura se nos retrasó un poco. Finalmente, en febrero de 2015 pudimos darle la sorpresa a Rubén y le regalamos el resultado para que desarrolle todo su arte sobre la base realizada con mucho "cariño familiar".
Y este es el resultado, ahora que ya le hemos dado el trabajo al artista esperamos con impaciencia el resultado del proceso de pintura. ¡Ánimo Rubén!.
Proceso
Al final tuvimos que tirar de algunas piezas ya creadas en plástico y resina, manos y pies, cabeza y casco, rifle y cantimplora, para ello recurrimos al almacén familiar, ¡Gracias Javi! El resto lo fuimos modelando con la Masilla Super Sculpey como base, Masilla Epoxy Tamiya para algún detalle pequeño, tiras de estaño y láminas de cobre para los accesorios.
Diseñando en papel.
Hace unos años comencé a preparar en papel una recopilando de información para diseñar la figura. Como siempre, fotos y la película nos sirvieron para realizar la figura a escala 1:35. Encontrando por internet que Charles media 1,65 mts. y usando una herramienta de calculo de escala del cuerpo humano, ajustando un par de imágenes a dicha escala preparamos nuestro manual que dejamos aquí para su descarga por si alguien le pueda servir.
Imprimiendo el esquema usamos dichos gráficas para crear un esqueleto en alambre con las proporciones impresas. Luego con un poco de paciencia ir rellenado de masilla los volúmenes del torso. piernas y brazos. Finalmente (y antes de colocar las piezas de plástico ;), horneamos el resultado durante 15 minutos a 130º centígrados. Apagamos el horno y dejamos la figura 30 minutos dentro de este para que se enfríe despacio y así evitar que se cuarteen las partes más pequeñas.
Finalmente, pegamos las piezas de plástico (adivina que pasaría si esto lo hicieras antes de hornear ;). Se de uno (que también colabora en esta web pero que no voy a nombrar; pues, se dice el pecado, pero no el pecador) que se le ocurrió acercar "demasiado calor" a la maqueta para que se endureciera la masilla, y acabo haciendo un tanque destruido para aprovechar el resultado.